Los diamantes son piedras preciosas con una composición simple. Sin embargo, a pesar de su sencilla estructura, el valor de estos puede llegar a ser muy elevado, por lo que para vender diamantes es importante tener conocimientos de los mismos.
Cómo ya hemos mencionado, los diamantes están formados de manera simple. En su totalidad, aunque alguna vez lo encontremos con una mínima proporción de nitrógeno, el diamante se compone por carbono puro cristalizado.
Las 5 “C” del diamante
A la hora de tomar la decisión de vender diamantes cabe tener en cuenta que el mercado de compraventa de diamantes es un mercado sencillo, formal y lógico. Un mercado en el cual debe introducirse una vez haya realizado algunas pesquisas.
El Instituto Gemológico de América (GIA) desarrolló las 4 “C” del diamante, un sistema universal que permite calificar y evaluar la calidad de cada diamante. Además, existe una quinta “C” tan importante como las demás.
El color
El color del diamante está ligado con su belleza. El color es el tono natural de la misma piedra, cuánto más cerca esté de ser incoloro mayor será su valor.
Actualmente son cuatro las escalas principales que se utilizan para indicar el grado de color de un diamante, siendo la escala creada por la GIA la más aceptada.
La escala empieza en la D, significando esto totalmente incoloro, hasta la Z, amarillo o marrón claro. Los diamantes que se encuentren más allá de la Z caen dentro de los colores de fantasía.
Para establecer que grado de color tiene el diamante que quiere vender, este se compara con una piedra de referencia. Las piedras de referencia suelen tener el color más claro posible, por lo que al comparar su diamante con el de referencia el experto determinará si tiene más o menos color.
El corte o la talla
Al igual que ocurre con el color, este factor también está directamente relacionado con la belleza del diamante. La talla indica cual es la forma de la gema, así como la calidad de sus proporciones y el acabado. Por lo que le corte de una gema, determina el brillo y el resplandor de la misa. Un equilibrio adecuado entre proporción, simetría y brillo le indicará si obtendrá mayor o menor valor al vender su diamante.
Existen diferentes tallas de diamantes siendo las más comunes las siguientes. El brillante, siendo el diamante con mayor demanda, tiene una forma redonda. La talla princesa es el diamante de forma cuadrada, la baguette el rectangular y el corte de pera tiene forma de gota. Por otro lado están la esmeralda, la marquesa, el óvalo y el trillion, que es triangular.
A la hora de valorar la calidad de talla de un diamante, hay que evaluar el trabajo de lapidación. Es decir, el corte realizado, la forma adquirida y el pulido del diamante.
En cuanto a la luz que incide en el diamante, el lustre es la luz que se refleja; y cuando es muy elevado se denomina el diamante como “adamantino”. La luz del interior es el brillo, y este se guía con el objetivo de que salga a través de la corona. Por lo que, si los ángulos no son correctos, la luz saldrá por un lugar incorrecto, acabando con un aspecto defectuoso.
La pureza
La pureza de un diamante reside en la ausencia de imperfecciones. Existen las imperfecciones internas llamadas inclusiones, y las externas llamadas manchas. Y, al igual que ocurre con el resto de las “C”, cuanto menor sea el número de inclusiones mayor será el valor del diamante, ya que son muy pocos los diamantes totalmente puros.
Cabe mencionar que los diamantes con manchas son más valiosos que los diamantes con inclusiones. Debido a que las manchas pueden ser corregidas con mayor facilidad, pudiendo mejorar su grado de pureza.
Sin embargo, si comparamos dos diamantes con la misma inclusión, debemos evaluar el tamaño y la posición de la inclusión para determinar su valor.
La escala de la pureza de la GIA es la siguiente:
- – Flawless: Sin inclusiones o manchas visibles con una lupa 10X
- – Internally Flawless: Sin inclusiones y con algunas manchas insignificantes
- – Very Very Small (VVS): Inclusiones extremadamente difíciles de ver con una lupa
- – Very Small (VS): Inclusiones menores, visibles solo con una lupa
- – Small Inclusion (SI): Inclusiones notables muy fáciles de ver con una lupa
- – Inclusions (I): Inclusiones obvias incluso a simple vista sin necesidad de usar lupa

El peso en quilates
El peso de un diamante se mide en quilates (ct), y cada quilate equivale a 0.20 gramos. En este caso, cuanto mayor sea el peso del diamante, mayor será el valor de tasación del diamante. Y es que, son muchos los diamantes pequeños que existen, y sin embargo, los diamantes grandes escasean por lo que su precio es más elevado.
Cabe añadir, que el tamaño no define el peso de un diamante. Si se encuentra ante dos diamantes con el mismo peso y que su tamaño sea ligeramente diferente, o por el contrario pueden ser dos diamantes con el mismo tamaño y una ligera diferencia de peso.
El certificado
El certificado tiene una gran importancia cuando se trata de vender un diamante. Un diamante certificado se traduce en confianza, el certificado le otorga al diamante su valor basándose en las cuatro características antes descritas. Además es un respaldo a la hora de efectuar la venta de su diamante ante el comprador.
Vender diamantes
Vender diamantes no es tarea fácil, y es frecuente sentir inseguridad al plantearse la venta de uno. Por ello, el lugar de venta debe ser un lugar en el que se sienta seguro/a y tranquilo/a y con la confianza de que será un experto gemólogo quien examine su piedra.
Para encontrar una empresa de confianza lo primero, y primordial, es evaluar su reputación. Verificar su historial mediante Google Business u otras plataformas donde aparezcan comentarios de otros clientes, escuchar las opiniones de gente con una previa experiencia es un buen método de valoración.
En Bonhill tenemos una dilatada experiencia de más de 30 años efectuando compras de diamantes, joyas y relojes con total transparencia y confianza.

Otro aspecto que debe tener en consideración es el precio que le ofrece cada comprador. A la hora de la tasación del diamante, algunos compradores le ofrecerán más que otros.
Si quiere vender un diamante deberá hacer una búsqueda y comparación entre distintos compradores para encontrar aquel que cumpla con sus expectativas.
En caso de tener cualquier duda estaremos encantados de poder ayudarle con la venta de su diamante.